08 febrero 2015

LA CAJA MISTERIOSA, Descubrir a través del tacto

Gonzalo jugando con la "CAJA MISTERIOSA"
La "caja misteriosa" es un recurso educativo útil para fomentar diversas áreas específicas del aprendizaje, porque a la vez que desarrolla el sentido táctil, también necesitará identificar las formas, tamaños y texturas... En realidad no es más que una caja cerrada, decorada para hacerla más atrayente, en la que le hemos hecho un agujero para poder introducir en su interior juguetes  u objetos que el niñ@ no podrá ver y que deberá identificar sirviéndose del tacto

Partiendo de esa base el juego puede presentar todas las variaciones que se os ocurran. Haremos una previa selección de juguetes u objetos que le resulten familiares y que sean muy distintos, en cuanto a tamaño, forma y/o textura, entre ellos. A Gonzalo le gusta jugar a "encontrar", para ello elegimos los juguetes por duplicado (por ejemplo, dos peras de plástico de la cocinita, dos piezas de construcción iguales, dos cochecitos de tamaño similar, dos pelotas de igual tamaño, o dos zapatitos de una muñeca, etc). Antes de introducirlos en la caja se los mostramos de uno en uno, dejando que los toque, que explore, mientras "acompañamos con la palabra", hablándole de lo característico de ese objeto que luego le van a permitir identificarlo "a ciegas" (por ejemplo "aquí tenemos dos coches! Ten, toma uno! ¿notas las ruedas en la mano cuando lo coges? Tiene cuatro, y tiene un morro largo ¿verdad?"). Cuando lo ha explorado le animamos a que introduzca los dos objetos iguales dentro de la caja, y seguimos con otro objeto; y así sucesivamente hasta que estén todos los objetos dentro. El número de objetos que emplearemos variará en función del niño. Es preferible empezar con poco para no cansarlo y no perder su atención.


 

Una vez los objetos estén en el interior de la caja, la sacudiremos suavemente, con el fin de mezclarlos. Dejaremos la caja sobre la mesa y le pediremos que introduzca la mano y saque un objeto. Cuando lo haya hecho le felicitaremos y preguntaremos ¿qué has sacado?, y le incitaremos a sacar su pareja, es decir, si ha sacado una pelota, le pediremos que meta de nuevo su mano y sirviéndose únicamente del tacto, encuentre la otra y la saque.

Recordemos que el juego siempre debe resultar divertido. Le enseñaremos a reirse cuando se equivoque y saque otra pieza y le animaremos a seguir buscando con una sonrisa!

Como decíamos, la caja la podéis adaptar a mil variaciones en función de las necesidades del niño. Podemos jugar con uno, dos o más ejemplares de cada objeto; podemos jugar exclusivamente a formas geométricas, a identificar piezas de fruta,... queda a vuestra imaginación. Pero, en cualquier caso, siempre nos va a resultar útil a la hora de trabajar conceptos como "dentro-fuera" de la caja, las unidades, las "grande-pequeño", las formas, las "texturas",...

PASO A PASO:
Para montar nuestra propia caja misteriosa le pedimos una caja de tamaño medio a un comercio cercano, que ya no la necesita y así nos podemos asegurar de que esté limpia. La cerramos. Luego, tomando un bol como base (podéis usar un compás) hicimos un agujero en uno de los laterales. 


Forramos una por una cada cara/lado de la caja con goma eva negra (incluida la cara en la que hemos hecho el agujero). Vamos haciendo también toda la decoración que queramos poner, como por ejemplo los interrogantes de distintos colores, o el perfil de goma eva rojo para la entrada de la caja, que hemos hecho sirviéndonos de un bol más grande que el del agujero y centrando luego el otro en su interior.


En el lado forrado en el que tenemos el agujero, repasamos con el dedo, palpándolo. Con ello conseguiremos dejar una marca suave que nos mostrará el contorno del agujero para que podamos hacer a ciegas cuatro incisiones, como si cortaras un pastel con 4 cortes para obtener 8 porciones, pero lo que obtenemos aquí son 8 "pestañas". Es decir, que no cortamos el perímetro, únicamente las incisiones centrales, porque eso permite que el niño/a pueda meter y sacar la mano y los objetos con facilidad pero sin ver el interior.




CONSEJO DE PETRA: Aunque la caja resulte tentadora, dejad que seque bien el pegamento antes de que introduzca el brazo en su interior. Y sobre todo, vigilad que los objetos que introducís no sean puntiagudos para evitar que los niños se hagan daño o que les produzca sensación de rechazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tus comentarios y opiniones. Esperamos ser de ayuda.